Son muchos los diseñadores gráficos que deciden trabajar como freelance, las ventajas son muchas, la principal eres tu propio jefe y eso es genial, pero no todos los diseñadores consiguen suficientes ingresos como para no tener que depender de un trabajo principal. En muchas ocasiones el problema esta en que un diseñador gráfico no tiene porque ser un gran comercial. A veces no se entiende que lo que hacemos en esas reuniones es vender literalmente nuestro trabajo, necesitamos demostrar al cliente que podemos aportar beneficios palpables a su negocio y actuar como medio de comunicación para la venta de sus productos. No entres en la dinámica de centrarte exclusivamente en tu diseño, no discutas sobre cosas irrelevantes y céntrate exclusivamente en lo que es importante para tu cliente. Se un vendedor antes el y un diseñador en tu casa.

¿Tiene la personalidad algo que ver con lo bueno que eres en tu trabajo? "Hay de todo para hacer un mundo" dice el viejo refrán. Que razón tiene cuando nos referimos a los lugares de trabajo. Desde los directores creativos más amables a los contables más rudos y contundentes, los estereotipos están ahí por una razón. Nuestras personalidades determinar el grado de adecuación que tenemos por el trabajo que hacemos. Es presumible, que los departamentos de recursos humanos sólo quieran reclutar a un tipo de personalidad para cada puesto. Un verdadero trabajador en equipo, una persona genial y positiva. ¿Cuántas veces has tenido que fingir ser esa persona para obtener un puesto de trabajo?